A nivel global, alrededor de 2.500 millones de personas no utilizan servicios financieros formales, lo que demuestra la gran brecha que existe. Si bien en Chile tenemos un panorama más alentador, pues estamos entre los países más avanzados de Latinoamérica, todavía existen tareas y desafíos pendientes.
Según el último Informe de Inclusión Financiera de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), el 97% de la población adulta del país, tiene acceso a algún producto financiero. No obstante, sólo un tercio de ella tiene acceso simultáneo a productos de crédito, ahorro y medios de pago. El documento da cuenta también que la amplia cobertura poblacional de los productos destinados al ahorro contrasta con el uso efectivo de los mismos, ya que una proporción significativa de las cuentas tiene saldos nulos o no presenta movimiento.
Para que nuestro sistema financiero se desarrolle de manera sustentable es fundamental que todos los actores que somos parte de éste, generemos mayor inclusión financiera, que se entiende como el acceso y uso de diversos productos y servicios financieros como el crédito, ahorro, medios de pago y seguros, por parte de las personas.
En Coopera tenemos como eje funda- mental generar inclusión financiera. Esto se traduce en el acceso que damos a perso- nas de ingresos medios y bajos; a peque- ñas empresas; a emprendedores; a produc- tores agrícolas; a miembros de las Fuerzas Armadas y a pensionados.
En el mundo, y en Chile en particular, la inclusión financiera es un desafío pendiente y sobre el cual todos tenemos que trabajar.
En nuestro sector, hemos estado impulsando distintas acciones para promover la inclusión financiera en el sistema chileno. Algunas de nuestras cooperativas miembros están abordando los medios de pago y, en esta línea, tenemos como objetivo extender este modelo de negocios y ampliar su acceso, ya que son relevantes para generar, de forma concreta, una mayor inclusión financiera.
Los medios de pago brindan la posibilidad de reemplazar el uso de efectivo, haciendo más seguras las transacciones para nuestros socios, entregándoles beneficios por su uso y aumentando el conocimiento transaccional de ellos. Permiten también acercarle soluciones más apropiadas a cada situación particular. Las cooperativas de nuestra asociación gremial queremos ser parte de este ecosistema, una tendencia que sigue avanzando y diversificándose en el mundo y en Chile.
Adicional a los avances que estamos haciendo como asociación gremial en este ámbito, consideramos que es muy importante también que prosperen iniciativas que se están discutiendo en el Congreso, las que, a nuestro juicio, generarán más inclusión financiera.
En esa línea, tenemos la convicción que se debe avanzar en el proyecto presentado por el Ejecutivo que crea un Registro de Deuda Consolidada para todos los oferentes del mercado, el que permitiría mejorar las condiciones crediticias para los buenos pagadores e incentivar el buen comportamiento de pago; fomentaría la competencia en el mercado de créditos; se reducirían los estímulos al sobreendeudamiento; además se fortalecería la gestión de riesgo de las instituciones financieras y mejoraría las herramientas de supervisión.
Esto nos permitirá potenciar el propósito de otorgar acceso a financiamiento adecuado a la capacidad de pago de las personas, generando así las instancias de inclusión financiera, desarrollo y bienestar que son tan necesarias para las familias de nuestro país.